El otro día mi sobrina, que es un amor (no es sólo amor de tía, es que tengo unos sobrinos que son dos soles :) ), estando en casa comiendo, me dijo que estaba buenísima la comida que había hecho (son muy agradecidos y un pelin pelotas jajaja, pero lo que me gusta como me lo dicen que los como a besos) y que si por favor para el próximo día que vinieran a casa si podía hacer natillas que le gustaban mucho y tenía muchas ganas de ellas. Su hermano, por su parte se animó a pedir magdalenas de paso, jaja.
Pues su tía muy obediente, hizo unas magdalenas y las natillas para que los dos disfrutaran.
La cara de felicidad al ir al cole a buscarlos, preguntarme que había de comer y yo decir sorpresa de postre y estar todo el camino a casa, haciendo preguntas a ver si adivinaban...llegó la comida que devoraron sin problema y al llegar al postre ver la cara de alegría al ver que eran las natillas que había pedido no tiene precio y más que venga corriendo me pegue un achuchón y me diga "gracias tata te quiero", una ya se derrite entera y le alegran la vida entera. El hermano a la par, hizo lo mismo porque había también magdalenas y ahora me comprendéis que son dos soles y son dos amores no? si es que los quiero con locura :)
Bueno después de esta declaración jaja creo que paso a poner la receta.
INGREDIENTES:
Para decorar:
PREPARACIÓN:
Hervimos la leche junto al palito de canela.
En un cuenco mezclamos las yemas con el azúcar, la maizena y el chorrito de vainilla. Reservamos.
Una vez caliente la leche retiramos la canela y echamos la mezcla del cuenco, vamos removiendo sin parar a fuego medio hasta que veamos la leche espesa. Dejamos templar.
Metemos al frigorífico al menos un par de horas (o toda la noche).
Decoramos con una galleta y espolvoreamos canela.
Elena.
Pues su tía muy obediente, hizo unas magdalenas y las natillas para que los dos disfrutaran.
La cara de felicidad al ir al cole a buscarlos, preguntarme que había de comer y yo decir sorpresa de postre y estar todo el camino a casa, haciendo preguntas a ver si adivinaban...llegó la comida que devoraron sin problema y al llegar al postre ver la cara de alegría al ver que eran las natillas que había pedido no tiene precio y más que venga corriendo me pegue un achuchón y me diga "gracias tata te quiero", una ya se derrite entera y le alegran la vida entera. El hermano a la par, hizo lo mismo porque había también magdalenas y ahora me comprendéis que son dos soles y son dos amores no? si es que los quiero con locura :)
Bueno después de esta declaración jaja creo que paso a poner la receta.
INGREDIENTES:
- 8 yemas de huevo.
- 8 cucharadas soperas de azúcar.
- Un chorrito de vainilla.
- 1 palito de canela.
- 1 litro de leche.
- 2 cucharadas soperas de maizena.
Para decorar:
- Galletas María.
- Canela
PREPARACIÓN:
Hervimos la leche junto al palito de canela.
En un cuenco mezclamos las yemas con el azúcar, la maizena y el chorrito de vainilla. Reservamos.
Una vez caliente la leche retiramos la canela y echamos la mezcla del cuenco, vamos removiendo sin parar a fuego medio hasta que veamos la leche espesa. Dejamos templar.
Metemos al frigorífico al menos un par de horas (o toda la noche).
Decoramos con una galleta y espolvoreamos canela.
Elena.
Mi querida amiga, tus sobrinos son dos soles, y la tia de esos sobrinos otro sol de los que brillas hasta por la noche jejeje, me imagino ver esas caritas cuando cada uno vio cumplido su deseo, y con esos ricos postres por que las natillas tienen una pinta espectacular. Mil besicos cielo
ResponderEliminarQue pinta mas buena, seguro que en mi casa no dura ni un minuto.Bsssss
ResponderEliminarSiempre eche de menos no tener sobrinos, os envidio, pero bueno la vida es asi, asi que haces bien cumplirles todo sus gustos, yo tambien me apuntaba a esas deliciosas natillas, que tienen una pinta de lo mas ricoooo... bsss
ResponderEliminarLas natillas con galletas también eran, y son, mis preferidas y ¿como no? si es que están buenísimas. Como tienen que estar las que nos has hecho a todos hoy.
ResponderEliminarBss
Donde estén unas natillas, que se quiten las de sobre, además de estar más ricas, es la satisfacción de hacer algo natural, a mi también me gusta ponerles una galleta, dan ese punto de crujiente, que me encanta, besos
ResponderEliminarSofía
Qué gusto por favor, por esos abrazos, esas sonrisas y esos "te quiero" se va a buscar la luna si hace falta porque ellos se lo merecen y siendo así de agradecidos, aún mas.
ResponderEliminarBss.
Que buenaas Elena, tus sobrinos no me extraña que estén encantados de la vida.
ResponderEliminarTe han quedado de manjar de dioses
Besinos
El Toque de Belén
Si las natillas solas están de cine con galletas serian un vicio, no hay nada tan rico y fácil de hacer, no se como hay gente que se atreve a comprarlas en el super, así caseritas y fresquitas recién sacadas de la nevera me pierden..Bess
ResponderEliminarque buenas!! y seguro que los peques disfrutaron de lo lindo hasta no dejar ni gota! bicos
ResponderEliminarElena, pero como no te van a comer a besos tus sobrinos si los mimas de esa forma. Confieso que hago lo mismo.. chis! no me descubras, jajaja. Me imagino que las magdalenas estarían igual de buenas que las natillas.
ResponderEliminarUn beso
ResponderEliminarBuenos días Elena. Un postre típico de toda la vida, estas natillas te han quedado de lujo, me imagino que a tus sobrinos les habrán encantado, Ahora solo falta que les prepares las magdalenas y las compartas con todos nosotros.
Un beso Paco