PASTEL DE LIMÓN Y LECHE CONDENSADA

Hoy os vengo con un postre super refrescante para estas comidas o cenas improvisadas, en las que tienes poco tiempo para preparar y que os quede un postre delicioso 🤤 

Nada de horno y todo bien frío 😋

Si usáis limones de verdad (como los míos 💛) ya ni os cuento como está este postre...pa´quitarnos el sombrero 😏

Súper fácil, con ingredientes sencillos, de andar por casa y que seguramente solemos tener en la despensa.

Además, podéis pedir ayuda a los peques de la casa para que lo hagan ellos o vosotros con ellos, será un momento muy divertido y gratificante 😍

Vamos a endulzarnos el día 😜, ¿os parece?

INGREDIENTES:

  • 2 limones grandes.
  • Bizcochos de soletilla (los que necesites según molde o fuente)
  • 400 ml de nata para montar bien fría.
  • 370 gr. de leche condensada.
  • Leche para bañar los bizcochos.

PREPARACIÓN:

Lavamos bien los limones y los rallamos. Reservamos la ralladura.

Hacemos zumo con los limones, colamos para evitar que se nos cuelen las pepitas. Reservamos.

Con la ayuda de unas varillas eléctricas montamos la nata que debe estar bien fría. Cuando esté casi montada, añadimos la ralladura de limón (dejando un poco para decorar), el zumo del limón colado y la leche condensada (que si la tenéis fría mucho mejor)

Terminamos de montar todo bien y empezamos a montar el pastel.

Cogemos una bandeja de cristal o un molde que queramos y ponemos en la base una capa de bizcochos que vamos a mojar con leche unos segundos (yo fui dejando entre 6-8 segundos por ambos lados del bizcocho) cuidado que no se empapen tampoco demasiado, tiene que haber un punto medio, ni seco ni demasiado mojado jeje.

Encima de esa capa echamos tres cucharadas de la crema y extendemos por encima cubriendo todo.

Ponemos otra capa de bizcochos, con el mismo proceso de antes.

Otra capa de crema como la primera.

Última capa de bizcochos remojados, otra vez crema cubriendo todo y lo que nos sobre a una crema pastelera y ponemos por encima (seguro que se os da mejor que a mí jiji)

Espolvoreamos ralladura de limón por encima y llevamos al frigorífico unas 6 horas. 

Servir bien frío.

Podemos hacer versión individual para llevar, como fue mi caso con esos tarritos de cristal ideales para llevar al trabajo y endulzarnos. El proceso de montaje es el mismo adecuando las cantidades 😊

Elena.


 


Comentarios